Cómo realizar una pintura al óleo en digital
En este tutorial se enseña cómo trasladar a soporte digital la técnica de pintura al óleo, logrando un resultado con aspecto tradicional. Utilizaremos los diferentes pinceles que proporciona el programa y otras herramientas de Clip Studio Paint.
Está recomendado tanto a aquellos artistas que tengan experiencia en el tradicional y quieran empezar en el arte digital, como a aquellos artistas digitales que quieran aproximarse a la técnica tradicional. Se recomienda experiencia previa de pintura en alguno de los medios, aunque el tutorial está explicado para que un usuario principiante pueda seguirlo.
Se grabó también el proceso de la ilustración para acompañar el tutorial:
Entender y usar referencias
Este paso es esencial a la hora de realizar cualquier ilustración. Buscamos referencias de cuadros al óleo para entender bien las características de la técnica. Podemos usar, por ejemplo, obras de artistas clásicos como Singer Sargent, Mead Schaeffer y Norman Rockwell como referentes principales. Lo importante es analizar los detalles de la técnica al óleo para entender como replicarla.
También necesitamos buscar referencias de lo que vamos a ilustrar. Para este ejemplo, se utiliza la foto de un gato en el ángulo preciso. No hay que replicar a la perfección la referencia, especialmente si no buscamos un resultado realista. Sin embargo, basarse en la realidad ayuda a desarrollar una obra más creíble.
Realizar el boceto
Para realizar el boceto podemos usar cualquier pincel de preferencia. No es necesario utilizar uno texturizado, aunque es importante que sea traslúcido. Es mejor utilizar un tamaño grande en el pincel, con esto evitamos detallar demasiado el boceto.
En este ejemplo, se utiliza el pincel de Acuarela opaca predeterminada de Clip Studio Paint.
Todo lo que vamos a bocetar será tapado por pintura más adelante y no compensa detallarlo excesivamente. La clave es que el boceto refleje lo suficiente para entender bien lo que vamos a dibujar.
Es recomendable dibujar desde el inicio las sombras más importantes de la ilustración. En el ejemplo, se añade la sombra del cuello. Esto ayuda a visualizar el resultado final.
Editamos el boceto utilizando la Herramienta de selección y la de Transformación libre para modificar la línea. En este tutorial que realicé anteriormente, se explica con detalle las posibilidades de la Herramienta de selección:
Para acceder a la herramienta de Transformación libre, contorneamos primero con la Herramienta de selección lo que deseamos editar. Después, vamos a la ventana Edición, hacemos clic en Transformar y por último clic en Transformación libre. Otra opción es presionar las teclas Ctrl, Shift y T simultáneamente en el teclado. Clicando y arrastrando los nodos del cuadrado que bordea la selección, podemos modificar su aspecto.
Cuando acabemos de editar el boceto, hacemos clic en Aceptar o presionamos Enter en el teclado.
Pintar la primera capa de color
Creamos una capa por debajo del boceto que actúa como base de la ilustración. En este ejemplo, se utiliza un tono marrón que imita el color un lienzo. Coloreamos el boceto con un color de la misma gama para que se integre bien. El objetivo es crear armonía entre todos los colores de la ilustración.
Podemos usar distintas herramientas para cambiarle el color al boceto. Como, por ejemplo, la función de Ajustar a la capa inferior o la de Bloquear píxeles transparentes. Ambas han sido detalladamente explicadas en este tutorial que realicé previamente:
A continuación, creamos una nueva capa por encima de la base y por debajo del boceto. En ella, aplicamos la primera capa de pintura. Como estamos en el medio digital podríamos hacerlo directamente con la herramienta de cubo de pintura Relleno. No obstante, como nuestra intención es la de seguir la metodología tradicional, no procederemos así.
Utilizamos distintos pinceles texturizados para aplicar el color. Se utilizan varios colores y distintas texturas para conseguir simular los pinceles del medio tradicional.
Estos son los pinceles utilizados en el ejemplo, creados por usuarios de la comunidad de Clip Studio Paint. Es bueno experimentar con los distintos pinceles para aprender a usarlos. En el vídeo del tutorial aparece el orden y los pinceles concretos utilizados en cada paso de esta ilustración.
Usamos varios pinceles con distintas texturas a lo largo del proceso, ya que usar un único pincel podría provocar el efecto de aplanar toda la obra bajo la misma textura.
Teniendo en cuenta la gama de colores que emplearemos en la obra, vamos pintando, utilizando colores pocos saturados y que varíen en tonalidad.
Aquí se demuestra la gran diferencia visual de usar la herramienta de Relleno a colorear manualmente el fondo.
Sombrear la figura
Creamos una capa por debajo del boceto y, usando el mismo color que en el boceto, sombreamos con mayor detalle teniendo en cuenta de donde procede la luz en el dibujo.
En este ejemplo, se utiliza este pincel creada por un usuario de la comunidad que funciona de maravilla para el resultado que queremos alcanzar.
Es un buen momento para volver a observar las referencias que hemos recolectado al principio del proceso. Gracias a ellas podemos entender mejor cómo actúan las sombras en los materiales que vamos a pintar.
Hay que entender la obra como una unidad total, no como elementos independientes. Sombrear por fuera de la figura es más que válido en esta metodología. La intención es que el fondo y la figura queden integrados para crear armonía en la ilustración.
Una ventaja del medio digital es la capacidad de voltear el lienzo con libertad. Esto nos permite ver la obra desde una nueva perspectiva para encontrar fallos que corregir. Clip Studio Paint posee una función no destructiva para logarlo con rapidez. Para ello, hay que hacer clic en este icono en el Navegador formado por dos triángulos denominado Voltear horizontalmente.
Colorear el fondo y la figura
Creamos una capa por debajo del boceto y la sombra. Cogemos un pincel y pintamos los colores que deseemos. Recomendamos utilizar distintas tonalidades del mismo color en la figura, teniendo en cuenta el fondo para implementar colores armónicos con él.
En esta imagen se muestra cómo se ve el color de la figura si desactivamos la capa de sombra.
Clip Studio Paint ofrece herramientas para modificar el color si lo deseamos. En este ejemplo, se utiliza la función de Corrección tonal para modificar el matiz del color. Para utilizarla, vamos a la ventana Editar. hacemos clic en Corrección tonal y seleccionamos Tono/ Saturación/ Luminosidad. En el menú de la herramienta podemos ajustar diferentes opciones hasta dar con el resultado que deseemos.
Este sería el resultado si activamos de nuevo la capa de sombra.
A continuación, añadimos un tono más oscuro y saturado al fondo en una nueva capa para equilibrarlo con la figura. Para darle vitalidad y armonía, utilizamos un tono principal y un par secundarios en menor cantidad. Uno de ellos siendo similar al color de la figura y otro opuesto al color base. En este ejemplo, se emplea verde oscuro como color principal, el amarillo como secundario y unas pequeñas pinceladas de azul.
Aparte de usar distintos pinceles con texturas, usamos con limitación la herramienta de Aerógrafo para fusionar los tonos entre ellos. Es importante no excederse usando esta herramienta, ya que podría tapar las texturas del resto de pinceles.
Pintar, pintar, pintar
Este es el paso más complicado, precisa de la habilidad de pintar con fluidez. Si este punto te resulta complicado, te animo a seguir practicando hasta lograr tu objetivo.
En el vídeo del proceso se puede visionar este apartado con claridad:
Sacamos de nuevo las referencias para tenerlas presentes mientras pintamos. Para los artistas que vengan de pintar en digital, es importante recordar que el objetivo es que parezca una pintura tradicional. Es bueno analizar los pequeños detalles de las referencias para replicarlas.
Es importante saber cuándo fusionar el borde de la figura con el fondo. No todo el contorno debe de estar integrado, pero sí una porción importante de este. Utilizando pinceladas con colores intermedios entre el fondo y la figura creamos la apariencia de que forman parte del mismo conjunto.
Hemos empezado la obra con colores poco saturados porque ahora aumentamos poco a poco la saturación y el contraste de los colores manualmente, pintando por encima los distintos tonos para controlar la armonía y los puntos de interés de la ilustración.
Debemos usar distintos pinceles con distintas texturas. Entender en qué partes debemos usar las distintas texturas nos ayuda a alcanzar un mejor resultado. Por ejemplo, en los puntos de mayor interés de la ilustración usamos texturas con más detalles y a un menor tamaño, mientras que en las zonas menos relevantes utilizaremos texturas más sutiles y planas para que el ojo del espectador pueda descansar.
Una ventaja que nos ofrece el digital es la capacidad de crear un número casi ilimitado de capas y poder editar su opacidad. Podemos crear capas por encima del dibujo con distintos colores o texturas y bajar la opacidad al gusto.
El mejor consejo para este paso es confiar en el instinto y no tener miedo a experimentar. Cuanto menos se utilice el atajo de Deshacer, mejor. Como creador, lo que sientas durante el proceso se traspasará a tu obra. Por ello, disfrutar sin miedo y aprovechar la libertad que ofrece este medio dará vitalidad a tu resultado.
Retoques finales
Este es el último paso del proceso. Gracias a las funciones que posee Clip Studio Paint, podemos editar y retocar la ilustración para conseguir el resultado que más nos guste.
En este ejemplo, se edita la saturación y contraste a la obra. Para lograrlo, fusionamos todas las capas en una y se empleamos la función de Corrección tonal explicada previamente.
Se recomienda duplicar la capa fusionada y realizar las ediciones en ella. Así, podemos fácilmente volver al estado original de la obra en caso de que no nos convenza la edición. También es posible jugar con las opacidades de las capas para encontrar el resultado óptimo.
¡Y aquí está el resultado final!
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